domingo, 23 de marzo de 2014

PARO Y MOVILIZACION A PLAZA DE MAYO EN EN TODO EL PAIS!!


EXIJAMOS LA CONTINUIDAD DEL PLAN DE LACHA NACIONAL


DECLARACION DEL BLOQUE PATAGONICO DE TRABAJADORES DE LA EDUCACION

 
ROSARIO General Motors: Basta de fraude... Hoy en Página 12 (página11
 

ARGENTINA: Un nuevo "maestrazo": necesitamos un plan de lucha nacional

Un nuevo "maestrazo": necesitamos un plan de lucha nacional      

Un nuevo "maestrazo":

necesitamos un plan de lucha nacional


La paritaria nacional docente, que el Gobierno quería utilizar como “paritaria testigo”, ha quedado suspendida en el tiempo, con silencio del Gobierno y de los gremios nacionales. Al cierre de esta edición, quince son las provincias que se encuentran en conflicto abierto contra los techos salariales. En este contexto todo indica que la “gran pulseada” se juega en Buenos Aires, y los docentes decidieron dar una respuesta contundente a este desafío.
Desde el Gobierno intentan con esta paritaria ponerle un techo salarial al conjunto de los trabajadores del país, pero la gran presión de las bases y la contundencia en la respuesta cambió bastante el guión de lo que estábamos acostumbrados a vivir al comienzo de cada ciclo lectivo en los últimos años.
Desde los medios se habla de una huelga histórica, y bien merecido está ese título. Van 15 días desde el inicio y la gran mayoría del país sigue en conflicto. Quienes cerraron lo hicieron en su mayoría rompiendo el techo salarial del 25%. Aunque quieran esconderlo, así es por ejemplo el aumento conseguido por los compañeros de Santa Cruz, que hacen aparecer como un 20%, pero que de bolsillo representa el 50%, y les lleva el salario inicial a ser el más alto del país. Esto, sumado al apoyo generalizado de la población y la disposición a pelear, obligaron a las conducciones gremiales a rechazar la conciliación obligatoria  y  llamar a un paro nacional de 48 hs. En Buenos Aires el intento de aumento por decreto fue rechazado, y la respuesta de la docencia fue contundente: miles y miles marchamos el miércoles 19 a La Plata, tomando en nuestras manos la convocatoria del Frente Gremial, para decirle al gobierno que estamos dispuestos a seguirla hasta el final.
Con una conducción burocrática tan acorralada, que debe hacer hasta lo que no quiere, es el momento más oportuno para exigirles y obligarlos a convocar un paro nacional de toda la docencia. Pero este nuevo “maestrazo” cuestiona a todos los dirigentes gremiales que no pueden hacer como si nada pasara. El triunfo contundente de esta lucha podrá lograrse con la unidad y un plan de lucha común del conjunto de las centrales obreras. Tenemos que exigirles a las centrales, a los Moyano, Caló, Yasky, Micheli y Barrionuevo, que rompan su pasividad y convoquen a luchar en apoyo a los docentes y con el conjunto de los trabajadores.
Pero sin esperar nada de estos dirigentes, los trabajadores de la educación debemos continuar haciendo activo el paro y organizándonos por abajo para imponer la continuidad, la nacionalización y el fortalecimiento de la lucha. El llamado del “Bloque Patagónico” de sindicatos provinciales opositores a la burocracia (ver página 7) y de los plenarios convocados por los SUTEBAS Multicolor muestran el camino a seguir. Con la misma fuerza reclamar el apoyo del conjunto de la comunidad y de los trabajadores, porque si ganamos los docentes, ganamos todos.



Estalla Buenos Aires, la lucha está en nuestras manos


Por Silvia Martín
Secretaria de Salud - SUTEBA La Matanza


La brutal devaluación, la carrera de precios que vino después y las ridículas ofertas de la paritaria nacional y provincial decretaron por sí sola la masividad del paro en Buenos Aires. Una duda surgía en cada escuela, cómo hacer para que no suceda lo de los últimos años: que el Frente Gremial Docente1 no levante el paro por pocas monedas anunciándolo por la televisión. A partir de ahí decenas de escuelas, usando la cadena telefónica citaron a asambleas y reuniones el primer día de clase. Otras avanzaron más allá agrupándose por zonas y saliendo a la calle o a la plaza de la zona para sacar afuera el conflicto.
Se empezó a organizar por abajo, las cosas empezaron a cambiar y los docentes tomamos en nuestras propias manos la lucha, nos emocionamos día tras día al enterarnos de los movimientos autoconvocados que iban surgiendo y que crecen con el correr de las horas. Cientos de compañeros se empezaron a reunir en Almirante Brown, Florencio Varela, Malvinas Argentinas, San Isidro, Lomas de Zamora, Pergamino, San Martín, Mar del Plata y un largo etcétera que aumenta cada vez más. Ante la falta de organización de la conducción celeste de SUTEBA, el deseo de luchar se abrió paso solo y comenzó a autoorganizarse. El corazón se nos acelera cuando vemos que estas convocatorias realizan marchas y actividades de miles, junto a padres, trabajadores de la zona y estudiantes.
En las seccionales que recuperamos junto a la lista Multicolor en las últimas elecciones también vivimos este espléndido proceso, en La Matanza las asambleas fueron creciendo semana a semana hasta llegar a 1.000 en la última, y con una gran marcha  distrital con más de 3.000 compañeros en la calle junto a los compañeros de FEB. En Bahía Blanca se hicieron asambleas de cientos y en unidad con otros estatales y marchas de 5.000 compañeros, reuniones comunes junto a delegados de FEB en Quilmes, nuclearon a cientos de maestros. Las marchas centrales de cada una de las CTA se llenaron de guardapolvos blancos y cuadrillé, con pancartas y consignas cuya firma era la escuela o el barrio, no importa quién convoque la marcha, ahí van los docentes. La multitudinaria marcha del 19 de marzo que tiñó de blanco la ciudad de La Plata nos llenó de fuerza y le puso a la conducción del Frente Gremial y al Gobierno un aviso importante: No pensamos rendirnos.
Los más jóvenes nunca habían visto tanto entusiasmo, nunca habían visto una expresión tan clara de las bases, nunca habían visto a las escuelas con su identidad, con sus consignas copando las marchas, los veteranos comparaban con el 2001 y otros con el maestrazo.
Es claro que no es un no inicio más, de la bronca estamos pasando a la acción, debatiendo en las escuelas, codo a codo, estamos tomando el conflicto en nuestras manos. Empezamos a ser los protagonistas del cambio y el entusiasmo radica en la capacidad de transformación que tiene nuestra lucha por la educación pública, por salarios dignos, por escuelas donde se pueda enseñar y aprender.
El retraso de la conducción provincial de SUTEBA para dar respuesta y colocarse al frente de esta huelga histórica es lo que generó estos procesos de autoconvocatoria en muchos distritos de la provincia, toda la base es consciente que no es uno de los tantos no inicios que la burocracia traicionó, que nos jugamos por algo más que ajustar un agujero más del cinturón, nos jugamos por derrotar el plan del Gobierno de hacer de la escuela pública un lugar donde los sectores más pobres estén ahí, solamente para eso, estar ahí. Y de los docentes, trabajadores cada vez más precarizados con sueldos miserables y su salud y la de su familia en la ruleta rusa.
Estoy orgullosa de mis compañeras de escuela y de los miles que no hacen paros domingueros y van a la escuela a hablar con  los padres, de los que usan viejas láminas descolgadas de la pared para hacer pancartas, de las que se niegan a ser actores de reparto, como les enseñó la burocracia del Suteba durante años, de ese papel  en que la lucha era ver por televisión cómo los dirigentes sonreían y se abrazaban con los funcionarios y nos mandaban a trabajar con un salario con menos valor que el del año pasado.
Para poder triunfar en esta dura batalla tenemos que profundizar el camino que empezamos. En primer lugar nacionalizando la lucha como lo plantea también la declaración del Bloque Patagónico, impulsando la más amplia unidad para enfrentar el ajuste. Junto con eso impulsando con todo, acompañando y participando en los procesos de autoconvocados que surgen en los distritos, organizando la coordinación efectiva de los que estamos en lucha como en los plenarios opositores o en las reuniones nacionales, pero sin perder de vista que esa fuerza hay que dirigirla hacia quienes tienen la obligación de ponerse a la cabeza de la lucha y profundizarla, exigiéndole a las conducciones gremiales provinciales y nacionales que unifiquen el plan de lucha.
Por último y fundamental, no dejando nada en manos de otro, que nunca más decidan por nosotros, nunca más el “facultar a los Secretarios Generales”, tampoco la democracia de unos pocos esclarecidos, que la base discuta y decida todo. Es hora de priorizar la unidad y la participación democrática de las bases por encima de las divisiones estériles entre cúpulas gremiales. Todos juntos luchamos en las escuelas. Todos juntos tenemos que decidir nuestro pliego de reivindicaciones, qué negociamos y cómo continuamos la pelea.
Más unidad y más democracia sindical para vencer.

Notas:
1 FGDB: Frente Gremial Docente Bonaerense, compuesto principalmente por SUTEBA y FEB.


Por salario, en defensa de la educación pública y nuestra obra social

Por Demián Romero
Secretario Gral. Adj. ATEN Provincial


Luego de que la devaluación golpeara el salario, bruscamente los trabajadores del país empezaron a acumular más bronca aún contra el Gobierno nacional. Entre los trabajadores de la educación la situación es insostenible, los docentes son los trabajadores que tienen el salario más bajo, una maestra con doble turno en Neuquén apenas llega a los $8.400. El Gobierno Provincial de Sapag se dedica a “explicar” que el déficit del presupuesto es muy grande y otorga por decreto una suma fija por única vez de $1000 mientras que por la devaluación del dólar recibirá cerca de mil millones de pesos que no tenía contabilizados. Con menos que ese dinero y utilizando sólo el 4% de las regalías petroleras podría dar un aumento salarial a todos los trabajadores estatales del 35%.

Preparar la lucha, la mejor garantía

En Neuquén la bronca crece, nuestros paros están siendo muy altos, buenas marchas, las asambleas han crecido y las compañeras y compañeros se muestran cautos y convencidos, una buena decisión, porque la lucha que más posibilidades de triunfar tiene es la que más se prepara. Vamos por la masividad, por la discusión en cada escuela, porque el cuerpo de delegados se pegue a la base, que la conducción escuche y proponga y lleve adelante lo que se decide, así hemos empezado y queremos continuar. Garantizar la participación es democracia sindical.
Desde el Frente Índigo en el FURA seguimos llevando adelante lo que el año pasado en la huelga propusimos en las asambleas y que muchas veces quedamos en soledad, vamos por la masividad de las medidas, junto a la base y no sólo con los que están decididos. Queremos impulsar con los decididos a los que tienen dudas, tomarlos de la mano, confiamos en la fuerza del conjunto que parte de cada escuela. Junto con esto desarrollar la democracia sindical impulsando guarderías y/o entretenimientos cuidados para que las compañeras puedan participar plenamente de las asambleas y eventos. Así este año se empezó a realizar en el norte de la provincia y se está implementando en la asamblea de capital y otras, una pelea que venimos dando desde el año pasado desde el Frente Índigo en el seno de la Comisión Directiva provincial (incluso al interior del FURA) como parte de la lucha de la mujer trabajadora.
Sabemos que para triunfar necesitamos unidad pero en serio, así lo hicimos en la movilización conjunta con la UNTER, ATE y demás gremios estatales juntándonos 15 mil trabajadores en el puente Cipolletti-Neuquén. Se reflejó una gran alegría de los trabajadores de la educación de ambas provincias al encontrarnos y marchar juntos y una fortaleza enorme en acto, imaginémonos si hubiese un paro nacional general de las centrales (CGT’s – CTA’s) y movilizaciones en todo el país por salario y contra el pago de la deuda externa, es decir, plata para los trabajadores no para el FMI. Por eso no vamos a dejar de exigirle a la CTERA que lo haga y seguiremos impulsando a la vez las coordinaciones efectivas que sean posibles como en el encuentro nacional docente y el Bloque Patagónico en el que acabamos de participar.



Sigue la pelea en Chubut


Por Carmen Britos
Secretaria de DDHH de ATECH Sur


La heroica lucha de 77 días llevada adelante y protagonizada el año pasado  por  docentes, auxiliares de la educación, padres y alumnos de la Regional Sur de Chubut que contó con el apoyo de trabajadores petroleros y de la población en general logró sólo desde esta región de la provincia torcerle el brazo al gobierno de Martín Buzzi. Esto trajo la consecuencia de que este 2014 los docentes de toda la provincia del Chubut hayan salido a luchar desde el comienzo de año.
Pese a que la dirección burocrática de Atech sigue siendo la misma,  la presión de otras localidades fundamentalmente del Noroeste y también en ciudades como Trelew, Rawson y Puerto Madryn obligaron a esta dirección al NO INICIO del ciclo lectivo, surgiendo docentes autoconvocados que por fuera de sus direcciones regionales impulsaron las medidas.
De entrada el Gobierno Provincial convocó a paritarias llevando propuestas que fueron rechazadas inmediatamente por lo ínfimas. No obstante ello, ya en dos oportunidades mejoró la propuesta en cifras que llegan al 26% del básico y mejoramiento en el porcentaje de antigüedad, desdoblando las paritarias en dos tramos volviendo a discutir salarios nuevamente en Julio, buscando que no le pase en toda la provincia lo que sufrió el año pasado con la derrota provocada por la lucha de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly. Pero la realidad parece no darle este resultado al gobierno, la lucha está tan fuerte que la base decidió a pesar de esta propuesta exigir más.

La unidad, el único camino
Para que  esta pelea, que es otra batalla por la escuela pública, gratuita y de calidad, triunfe es necesario retomar el camino de la lucha de los 77 días del 2013 y convocar a padres, alumnos, trabajadores y a la comunidad para que vuelvan a hacer propia esta lucha. Ha sido muy importante al igual que el año pasado el apoyo recibido por nuestros gremios hermanos de la Patagonia (ATEN, ADOSAC, SUTEF y UNTER) que se hicieron presentes el lunes 17 de marzo expresando su solidaridad y avanzando en la intención de unificar las luchas exigiendo un salario básico unificado a nivel nacional con reconocimiento de la zona patagónica, el rechazo a la reforma educativa, laboral y previsional, la exigencia a que CTERA convoque a un paro nacional para que las luchas triunfen y no al procesamiento de los compañeros y trabajadores por luchar.

Argentina: Campaña internacional contra el fraude en elecciones sindicales de General Motors

Fraude en elecciones sindicales de General Motors      

En el día de la fecha 14/03/2014 mientras se realizaban las elecciones para delegados, en el cuarto de votación se encerraron bajo llave MILICI ANTONIO JORGE, presidente de la junta electoral y el presidente de mesa del sector, sin dejar pasar a candidatos para cumplir con su labor de fiscalizar de la elección.


Luego de estos hechos fueron al cuarto oscuro muchos dirigentes sindicales de SMATA Rosario, para amenazar la integridad física de uno de los propuestos a delegados que solicitaba controlar la votación, Sebastián Romero, y de cualquier otro candidato que quisiera entrar a fiscalizar la elección. Al mismo tiempo que una patota ocupaba el lugar el veedor del Ministerio de Trabajo, Miguel Angel Sanchez, que debía controlar la transparencia de la elección, estaba ausente del lugar. Estos hechos atentan contra la democracia sindical y contra los derechos de los trabajadores de toda la planta de GM. Hacemos responsable al ministerio de trabajo de Rosario y a su veedor, a la junta electoral y al SMATA Rosario de este fraude que se intenta cometer contra los trabajadores de GM.



Los abajo firmantes repudiamos el escandaloso fraude realizado el 14 de marzo de 2014 por la burocracia sindical del SMATA, junto con la patronal en la planta de la General Motors, en las elecciones de delegados, con la complicidad del Ministerio de Trabajo de la Nación, no respetando el derecho de los trabajadores de elegir libremente sus delegados. Pedimos la inmediata nulidad de estas elecciones y que se convoque a nuevas elecciones.

Nombre y Apellido            
DNI            
Cargo Sindical                   
Firma
PARTIDO SOCIALISTA DE LOS TRABAJADORES UNIFICADO -PSTU-
en el Frente de Izquierda y los Trabajadores

La crisis llegó para quedarse

La crisis llegó para quedarse      
VENEZUELA
Escrito por Leo Arantes - UST Venezuela   
Jueves 20 de Marzo de 2014
Existe entre la mayoría de la población el convencimiento de que la economía del país no marcha nada bien, pese a los altos precios del barril de petróleo.

La problemática económica es evidente, la escasez de los productos más básicos, los altísimos precios de los artículos, salarios que no alcanzan para nada, el desempleo y servicios públicos totalmente deteriorados, generan un creciente malestar entre los trabajadores y el pueblo en general.

Una economía en declive. Renta petrolera y caída del Producto Interno Bruto (PIB)
 
El año pasado la cotización promedio del petróleo venezolano superó los $ 100 dólares por barril. No obstante, pese a estos niveles de ingreso la economía tuvo un crecimiento anémico de 1,6% Las proyecciones oficiales para 2014 son de un crecimiento de 4%, aunque diversas agencias de estudios económicos ponen en duda tal pronóstico. Se muestra aquí el indicio de una grave contradicción económica: aumento de la renta petrolera y escaso crecimiento económico.

Tal contradicción, casi seguramente está determinada por la caída en la producción petrolera, la gran tajada de la renta que se llevan las transnacionales a través de las empresas mixtas, los pagos por concepto de deuda externa e interna, la utilización del petróleo para cancelar el endeudamiento con China, las ventas a futuro de crudo que no generan ingreso inmediato de divisas y, aunque parezca increíble, los gastos por concepto de importación de petróleo para cumplir compromisos internacionales.

Veamos un poco lo de las ganancias de las transnacionales; aunque no disponemos de datos cuantitativos, para evidenciarlas basta con citar un artículo publicado por la BBC Mundo, titulado: «¿Por qué las multinacionales no se van de Venezuela?». Allí se reseña: «...la explicación está en la cuantiosa renta petrolera que le confiere al país condiciones especiales para los empresarios nacionales y extranjeros. Para las transnacionales, acostumbradas a nadar en aguas turbulentas, y con todos los recursos financieros y tecnológicos a su disposición, las supuestas trabas burocráticas gubernamentales, no son un obstáculo para seguir haciendo negocios». Y continúa: «El país es uno de los principales productores de petróleo del mundo. El costo de producir un barril al día es 10 veces menor al precio que se obtiene en el mercado mundial por el mismo. El diferencial que es aproximadamente de 90 dólares, entra al torrente económico del país, estando así a la disposición de todas las empresas. Además, el ser país petrolero le garantiza a Venezuela tener siempre abierto el crédito externo».

Todos estos elementos contribuyen a achicar la parte de los ingresos petroleros con la que se queda el país, razón por la cual faltan los dólares necesarios para el funcionamiento de la economía, haciendo que el gobierno, para poder cumplir con los compromisos adquiridos con la burguesía parásita, implemente medidas de ajuste contra los trabajadores. Todo esto conlleva, además, al creciente endeudamiento del país y de la estatal petrolera, la falta de inversión en las empresas básicas y otras empresas estatales, y los recortes al gasto social, como veremos más adelante.

Otros sectores industriales también se han contraído, el sector automotriz por ejemplo cayó 30,77% respecto del año anterior, la producción de cabillas en Sidor descendió 18,9%, situaciones similares se observan en las cementeras y en la construcción.

La carga de la deuda
 
Otro flagelo que azota nuestra economía es el peso de la deuda pública, tanto externa como interna. Voceros gubernamentales como el Ministro de Finanzas, Nelson Merentes, y el diputado oficialista, Ramón Lobo, afirman que el endeudamiento externo del Estado alcanza los 98 mil 142 millones de dólares, lo que representaría un 26% del PIB; la opositora cámara de industriales, CONINDUSTRIA, sostiene que el endeudamiento interno ascendía en setiembre del año pasado a 66.746 millones de dólares.

Tomando estas cifras como referencia estaríamos hablando de una deuda pública global de 164.888 millones de dólares, esto sin sumar la deuda de PDVSA con los proveedores y el Banco Central de Venezuela (BCV).

Los pagos por servicio de la deuda pública, tanto interna como externa, vienen incrementándose de manera considerable; para 2014 se ha comprometido un gasto por servicio de deuda de 121,5 millardos de bolívares (19,2 millardos de $), una cantidad más alta que lo asignado a las partidas de al menos cinco ministerios, entre ellos algunos muy importantes desde el punto de vista social, como educación (55,2 millardos de Bs.), Salud (30 millardos de Bs.) y Vivienda (3,2 millardos de Bs.).

Inflación, escasez y políticas de ajuste
 
Lo anterior es sólo una muestra de la política de ajuste que el gobierno viene implementando contra los trabajadores y el pueblo. Estas políticas incluyen además de estos recortes en el gasto social, la devaluación monetaria con sus efectos inflacionarios, el estancamiento de los salarios a través de congelar las discusiones de las convenciones colectivas, y se discuten posibles aumentos de la gasolina y de servicios básicos como la electricidad.

La devaluación, pese a las exclamaciones oficialistas de que no se llevaría a cabo, en los hechos se concretó al excluirse varios e importantes sectores de la asignación a tasa oficial (6,30 Bs.) y ser trasladados a la tasa del SICAD (11,30 Bs. mínimo); ahora empieza a implementarse una nueva versión del SICAD que incluye la novedad de que particulares puedan vender divisa extranjera tanto en bonos como en efectivo, en los hechos una liberación del dólar.

La inflación, por su parte, continúa su marcha galopante, a 56,2% con que cerró en 2013 hay que sumarle 3,3% de enero 2014, lo que arroja una inflación anualizada de 59,5%; el aumento de 10% en el salario mínimo anunciado en enero por Maduro para enfrentar la inflación provocaría risa de no ser por lo lamentable de la situación; la cesta básica se ha ido por las nubes, incrementándose el equivalente a dos salarios mínimos en el último año, con lo cual según el CENDAS para poder costearla se necesitarían cinco salarios mínimos (15.919,76) bolívares. El índice global de escasez llegó en enero a 28%.

Uno de los rubros que más se ha incrementado es el de los alimentos, y también aumentaron considerablemente los rubros vestido y calzado, alquiler de vivienda y artículos de higiene personal y limpieza del hogar.

En resumen una situación por demás complicada que, más allá de sus mutuas acusaciones y diferencias tácticas, tanto gobierno como oposición pretenden resolver haciendo apretar el cinturón a los que menos tenemos, es decir, a los trabajadores, a los que vivimos de nuestros salarios.

Enfrentemos el ajuste
 
El gobierno de Nicolás Maduro, en su enfrentamiento a la muchas veces mencionada “guerra económica”, ha venido implementando toda una serie de medidas económicas, que lejos de golpear a su supuesto enemigo, es decir, “la burguesía opositora, apátrida, especuladora y saboteadora” –para usar sus propias expresiones–, terminan llenando los bolsillos de esta burguesía y también los de la boliburguesía y vaciando los de los trabajadores y sectores populares.

Es que la devaluación, con su incidencia en los niveles de inflación; la liberación en los hechos de los precios, pese a los anunciados e ineficaces controles; los pírricos aumentos de salario mínimo; el congelamiento de la discusión de los convenios colectivos, principalmente en el sector público y empresas estatales, o su discusión a niveles muy rebajados como en PDVSA; la permanente entrega de dólares a la burguesía, para su fiesta especulativa; los pagos de deuda externa; los recortes al gasto social; y la criminalización de la protesta social y laboral; terminan siendo medidas que aumentan el lucro de la burguesía.

Para citar sólo un par de ejemplos, sólo el año pasado la banca privada obtuvo ganancias del orden de los 33.000 millones de Bs., y más de 20.000 millones de dólares fueron asignados a “empresas de maletín” para la importación de alimentos y diversos bienes, sin que estas importaran nada e hicieran uso de los mismos para la especulación obteniendo así cuantiosos beneficios.

Por su lado, los trabajadores y las masas populares viven un calvario de elevados precios, escasez, interminables recorridos de supermercado en supermercado para conseguir alimentos, largas colas, etc…

Los servicios públicos están por el suelo, los salarios cada vez alcanzan para menos y nuestra calidad de vida va en franco deterioro.

Frente a esta situación es necesario construir la unidad de la clase para movilizarnos y oponerse al ajuste; el llamado es a la UNETE, el FADESS, la CCURA, así como a las distintas corrientes de izquierda independiente a impulsar una campaña nacional para defender nuestras conquistas y frenar el ajuste. La Unidad Socialista de los Trabajadores ya está dando los pasos en esa dirección.
 

La huelga general ganó terreno y ya es una realidad

La huelga general ganó terreno y ya es una realidad      
PARAGUAY
Escrito por PT Paraguay   
Jueves 20 de Marzo de 2014
La huelga general convocada para el 26 de marzo de 2014 es el principal acontecimiento sociopolítico en la actual coyuntura del país. 

Ha ido ganando apoyo en todos los sectores explotados y oprimidos y podemos decir, sin temor a equivocarnos, que hoy, ya es una realidad. La vemos cercana, fuerte y firme.

No es exagerado decir que adquiere un carácter histórico para el pueblo trabajador de la ciudad y del campo, no tanto por el criterio de tiempo, sino por lo que está en juego y por los efectos posteriores. Luego de 18 largos años, el pueblo trabajador se juega la vida, por decirlo de alguna manera.

La ofensiva del gobierno colorado de Cartes es el contexto en el que la huelga general está convocada. Cartes, desde su arribo al poder, ha apretado las clavijas de todo el sistema político-institucional para concentrar más poder (modificación de la Ley de Seguridad Interna) y asegurar más ganancias a los sectores más poderosos del país, sobre todo a aquellos ligados capital trasnacional e imperialista.

La actitud general del gobierno se caracteriza por la soberbia ante el pueblo y sus organizaciones y el servilismo ante los empresarios y el capital extranjero.

Por el lado del pueblo trabajador la situación ha estado caracterizada por la atomización, la falta de confianza en las propias fuerzas, el agudo desprestigio –y con razón– de las dirigencias tradicionales del movimiento, que afecta la unidad y la moral, así como organizaciones con funcionamiento anémico y escasa representatividad.

Esta huelga es una acción clave

En este marco, la huelga general es una acción clave y fundamental que marcará en cierta manera la dinámica de la situación del pueblo trabajador, en el futuro inmediato.

Un éxito de la huelga, que se expresará en un acatamiento respetable y ánimo general con el que salga el movimiento de esta acción, insuflará confianza a sus fuerzas y a los distintos sectores sociales que lo componen; y en la contracara, el gobierno verá achicarse su espacio de maniobra y menguará su confianza ante las clases sociales en general, incluso afectará negativamente su actual cómodo muñequeo entre los distintos sectores de los capitalistas.

Si, por el contrario, la medida de fuerza es un fracaso, debilitará aún más a todos los sectores del movimiento popular y de discriminados en general, se reducirá todavía más su confianza, y desinflará acciones en el futuro inmediato. El gobierno y los capitalistas en general se sentirán a sus anchas y con los pechos henchidos para seguir con su ofensiva como hasta ahora; seguirán apretando la clavija de la explotación y la opresión en general.

Es por esta situación que todos los sectores debemos hacer lo que esté a nuestro alcance con gran entrega y sacrificio de todo tipo para que la huelga sea el peldaño inicial para la recuperación y reorganización del movimiento de los trabajadores y del pueblo en su conjunto. Con un movimiento más fuerte se podrá encarar las luchas en mejores condiciones.

La huelga general viene ganando volumen

En ese contexto, la huelga general viene ganando terreno. Se viene convirtiendo en un canal en el que todos los sectores sociales –los que sufren atropellos, injusticias, la explotación, la discriminación o la opresión en todas sus formas– están encontrando un canal de expresión y manifestación contra el gobierno colorado de Cartes.

El gobierno es consciente de este hecho y se demostró con el recientemente otorgado reajuste salarial de 10%. Luego de decir que no había condición alguna para ningún reajuste, cambió radicalmente y en un abrir y cerrar de ojos reajustó el Salario Mínimo Legal y está lanzando a todos sus ministros a negociar con las centrales sindicales. El objetivo que persigue es desinflar la huelga y si logra desactivarla, aún mejor.

Las centrales sindicales están firmes y aseguran que la huelga es irreversible. Es que los dirigentes son conscientes de que necesitan una huelga que les reposicione en una mejor situación.

Están todas las centrales

Un hecho positivo es que en esta medida de fuerza confluyen las ocho centrales sindicales existentes en nuestro país, sean de la orientación que fueran. Hasta la Central Nacional de Trabajadores (CNT), que venía negándose a convocar, se vio obligada a hacer un Congreso para decidir la convocatoria a la huelga. Esto fue producto de la fuerte presión que llega desde las bases y desde las diversas dirigencias y sectores sociales.

Las reivindicaciones son claras y hacen a problemas sentidos: reajuste salarial de 25% para equiparar a la pérdida acumulada del poder adquisitivo; derogación del aumento del pasaje, que éste vuelva a G. 2000; derogación de la Ley de Alianza Público Privada; por la Libertad Sindical y el fin de la criminalización de las luchas sociales. Esos son los puntos fundamentales, aunque cada sector social que se va acoplando, va levantando sus propias consignas.

Tiene también el apoyo activo de la inmensa mayoría de las organizaciones campesinas, indígenas, barriales, estudiantiles y populares.

Son muchas banderas y en el marco de la huelga general hay que alzarlas todas porque estamos ante una acción que galvaniza todas las reivindicaciones y amalgama todas las banderas.

No hay tarea más importante para todos los sectores sociales y políticos del pueblo trabajador que convertir la huelga general del 26 de marzo en un acontecimiento histórico favorable.