Escrito por SI-LIT El ex obispo Fernando Lugo llegó a la presidencia de Paraguay hace casi dos años tras su victoria electoral contra el Partido Colorado, que gobernó Paraguay incluso bajo la dictadura de Stroessner.
Lugo era visto por las masas como la esperanza de un cambio radical en Paraguay. Sin embargo su gobierno nunca dejó de ser un gobierno burgués. Lugo ganó la contienda electoral en coalición con el (Partido Liberal Radical auténtico (PLRA), un sector de la burguesía paraguaya. La inmensa mayoría de la izquierda paraguaya, a excepción de nuestros compañeros del PT, se sumó a la campaña por su elección y defienden hasta hoy su presidencia siendo socios menores del gobierno.
Su elección fue saludada por Evo Morales, Hugo Chávez, Tabaré Vázquez, Lula y hasta Fidel Castro. Hasta hoy se lo considera uno de los gobiernos “bolivarianos”, “socialistas” o de “izquierda” del continente.
El gobierno de Lugo-PLRA gobernó desde el primer momento para los ricos paraguayos y defendió los intereses de las multinacionales y latifundistas, principalmente brasileños. En este tiempo ha perseguido y reprimido a los campesinos y sindicalistas paraguayos además de tomar medidas económicas que no han hecho más que empeorar el nivel de vida del pueblo.
Ahora las acciones del denominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), a quien se le atribuye algunos famosos secuestros, han sido tomadas como excusa por el gobierno de Lugo para declarar el estado de excepción en 5 departamentos del país. Esta medida significa que durante su aplicación la población se queda sin garantías democráticas. Desde su entrada en vigor gran parte del Paraguay está en manos del ejército, que tendrá amplios poderes para reprimir no solo al EPP sino a las masas campesinas y de trabajadores organizados. Como dice la declaración de nuestros compañeros del PT “Mediante esta figura,(el estado de excepción) el gobierno tendría superpoderes para combatir la “insurgencia” y podría allanar viviendas y locales, realizar detenciones sin orden judicial, prohibir reuniones, manifestaciones públicas, además de profundizar la militarización de la zona, como claman Franco y la derecha tradicional”.
El Estado de Excepción fue utilizado por la dictadura de Stroessner con la denominación de Estado de Sitio. Lugo, que viene de realizar acuerdos con el imperialismo yanqui, que ha formado a sus batallones de “contrainsurgencia” y con el gobierno colombiano de Uribe, que le está asesorando, ha tomado el camino de la represión al pueblo pobre paraguayo. Así no solo ha seguido el camino de los gobiernos del Partido Colorado que lo antecedieron sino que ha retomado los métodos de la sanguinaria dictadura militar.
No contento con la aplicación del estado de excepción, el gobierno de Lugo pretende, según sus principales voceros, militarizar el país, otorgándole a las Fuerzas Armadas la potestad de usar sus armamentos sin la necesidad de declarar el estado de excepción. Para ello pretenden plantear la modificación de la ley de Defensa Nacional y Seguridad Interna.
Solo la movilización de las masas podrá impedir que pueda aplicar el Estado de Excepción contra los campesinos, trabajadores y sectores populares paraguayos. Es necesario que la izquierda que hasta ahora ha apoyado a Lugo que se oponga frontalmente al Estado de Excepción y convoque unitariamente a resistir las medidas autoritarias.
Desde la LIT (CI) llamamos al conjunto de la izquierda mundial y a todos los sectores sindicales, políticos y sociales democráticos a rechazar el Estado de Excepción en Paraguay, así como la pretensión de dar todos los poderes a los militares, como en la época de la dictadura stronista.
Hay que denunciar todos los atropellos que por la medida del gobierno de Lugo puedan generarse por parte de las fuerzas armadas y demás fuerzas represivas de ese país. Es urgente que se realicen pronunciamientos contra esta medida desde todas partes del mundo y protestas ante las embajadas o consulados paraguayos. Hagámosle saber a Lugo que las masas no le van a apoyar en su camino de represión al pueblo.
Es necesaria la más amplia solidaridad con el pueblo paraguayo para que puedan impedir y desarmar las medidas de excepción.
¡Abajo el Estado de Excepción en Paraguay!
¡Defendamos todos los derechos democráticos de los campesinos y trabajadores paraguayos!
¡No a la represión!
Secretariado Internacional de la LIT(CI)
São Paulo 3 de Mayo de 2010
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